Participar activamente en el tratamiento y mantenerte lo más sano posible es fundamental para vivir con fibrosis pulmonar. Por esta razón, es importante:
- Dejar de fumar. Si tienes una enfermedad pulmonar, es muy importante que dejes de fumar. Consúltale al médico sobre las opciones para dejar de fumar, por ejemplo, los programas específicos para esto, en los que se usan varias técnicas de eficacia comprobada que ayudan a dejar el hábito de fumar. Además, debido a que el humo de segunda mano puede ser nocivo para los pulmones, evita estar con personas que fuman.
- Aliméntate bien. Las personas que padecen enfermedad pulmonar pueden perder peso debido a que les resulta incómodo comer y a la energía extra que necesitan para respirar. Aún así, es fundamental consumir alimentos nutritivos que contengan las calorías adecuadas. Intenta consumir porciones más pequeñas con mayor frecuencia durante el día.
Come muchas frutas y vegetales, cereales integrales, lácteos con bajo contenido de grasa o sin grasa, y carnes magras. Evita las grasas trans y las saturadas, la sal en exceso y los azúcares agregados. Un nutricionista puede darte más pautas sobre alimentación saludable.
- Ponte en marcha. La actividad física regular puede ayudarte a mantener la función pulmonar y a manejar el estrés. Intenta incorporar la actividad física, como caminar o montar en bicicleta, en tu rutina diaria. Habla con el médico sobre las actividades que pueden ser adecuadas para ti. Si, con el tiempo, necesitas ayuda para moverte, como una silla de ruedas, busca actividades o pasatiempos que no requieran que camines.
- Tómate tiempo para descansar. Asegúrate de descansar lo suficiente. Tomarte tiempo para descansar puede ayudarte a tener más energía y sobrellevar el estrés que te genera tu afección.
- Vacúnate. Las infecciones respiratorias pueden empeorar los síntomas de la fibrosis pulmonar. Debes colocarte la vacuna contra la neumonía y la vacuna antigripal inyectable anual. Es importante que tus familiares también se vacunen. Durante la temporada de gripe, evita las multitudes.
- Cumple con el plan de tratamiento. Necesitarás un tratamiento continuo. Sigue las instrucciones del médico, toma los medicamentos según te lo indiquen y adapta tu alimentación y la actividad física que haces como sea necesario. Ve a todas las consultas con el médico.
Estrategias de afrontamiento y apoyo
La fibrosis pulmonar es una enfermedad crónica progresiva, lo que quiere decir que empeora con el tiempo. Conocer más sobre la enfermedad puede ayudarte a ti (y a tu familia) a afrontarla. Realizar rehabilitación pulmonar puede ayudarte a controlar los síntomas y mejorar el funcionamiento diario.
Tener fibrosis pulmonar puede causar miedo y estrés. Pasa tiempo con tus familiares y amigos, y cuéntales cómo pueden apoyarte y ayudarte. Habla con tu médico acerca de la enfermedad y de cómo te sientes. Si estás deprimido, el médico podría recomendar que hables con un profesional de la salud mental.
Participar en un grupo de apoyo con personas que tienen fibrosis pulmonar podría ayudarte. Puede ser útil hablar con otras personas que tengan síntomas o tratamientos similares y analizar con ellos las diversas estrategias para afrontar la afección.
A medida que la enfermedad avance, es probable que el médico te recomiende que analices con tu familia los temas relacionados con el fin de la vida y que planifiques tus directivas anticipadas.
Preparación para la consulta
Si tu médico de atención primaria sospecha que tienes un problema pulmonar grave, probablemente te derive a un neumólogo, un médico especializado en enfermedades de los pulmones.
Qué puedes hacer
Antes de la consulta, quizás quieras preparar una lista de respuestas a las siguientes preguntas:
- ¿Qué síntomas tienes y cuándo comenzaron?
- ¿Recibes tratamiento para alguna otra afección?
- ¿Qué medicamentos y suplementos has tomado durante los últimos cinco años?
- ¿Fumas? Si la respuesta es sí, ¿hace cuánto tiempo?
- ¿Qué trabajos has tenido, incluso si solo fueron unos meses?
- ¿Algún familiar tiene alguna enfermedad pulmonar crónica?
- ¿Alguna vez has recibido quimioterapia o radioterapia para el cáncer?
- ¿Tienes alguna otra afección, específicamente, artritis?
También es posible que quieras que un familiar o amigo te acompañe a la consulta. La fibrosis pulmonar es una enfermedad grave y compleja. Un amigo o familiar puede brindarte apoyo emocional y ayudarte a recordar información que quizás hayas olvidado o no hayas escuchado. Puedes tomar nota.
Textos: Clínica Mayo. (Libro de salud familiar de Mayo Clinic 5ª Ed.) mayoclinic.org